El Palau Güell desvela sus secretos con una visita por sus rincones ocultos
Mientras la familia Güell disfrutaba de cenas en el salón principal de su majestuoso palacio, el personal del servicio observaba desde las alturas, atentos a cada gesto para anticipar cualquier necesidad. Desde esas celosías, el equipo tenía una visión privilegiada de los eventos sociales de la élite barcelonesa, con la familia Güell como protagonistas. Este acceso a la vida privada les permitió conocer detalles íntimos, rutinas y secretos de los miembros y sus invitados. Hoy en día, estos secretos ya no están reservados solo para el servicio; la visita guiada “El Palau Güell secreto” ofrece la oportunidad de descubrir los rincones ocultos y las historias menos conocidas del edificio diseñado por Gaudí.
La visita se realiza en horario vespertino y permite acceder a áreas del palacio que normalmente están cerradas al público. Los visitantes pueden asomarse por las mismas celosías desde donde el personal vigilaba discretamente, y así experimentar la vida cotidiana de la familia Güell a finales del siglo XIX. Este impresionante edificio, que fue la primera gran obra encargada a Gaudí por Eusebi Güell, combina innovadoras técnicas arquitectónicas que sirvieron de base para los futuros proyectos del arquitecto. En cada rincón del Palau Güell se percibe la esencia de Gaudí y su talento único.
Uno de los aspectos más fascinantes de la visita es el recorrido por los espacios destinados al servicio, como el montaplatos que conectaba la cocina con el comedor. Además, los visitantes tienen la oportunidad de explorar las escaleras y puertas secretas que permitían al personal moverse sin ser visto. La única escalera que conectaba todas las plantas del palacio era exclusiva para el personal, y conducía hasta la azotea, un lugar emblemático con sus famosas chimeneas serpenteantes.
Otro punto destacado del recorrido es la pequeña habitación del cochero, que durante la Guerra Civil y la posguerra sirvió como celda para detenidos. Las paredes de esta cámara están llenas de inscripciones y dibujos hechos por los prisioneros, un testimonio conmovedor de los tiempos convulsos que vivió Barcelona. La visita “El Palau Güell secreto” revela estos y muchos otros detalles desconocidos de este icónico edificio, invitando a los visitantes a sumergirse en la historia del palacio y de la familia Güell.
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